martes, 4 de agosto de 2009

GRECIA - Siglo V A.C.


... La palabra es un poderoso soberano que, con un cuerpo pequeñísimo y completamente invisible, lleva a cabo obras sumamente divinas. Puede, por ejemplo, acabar con el miedo, desterrar la aflicción, producir la alegría ó intensificar la compasión.


... La poesía toda yo la considero y defino como palabra en metro. A quienes la escuchan suele invadirles un escalofrío de terror, una compasión desbordante de lágrimas, una aflicción por amor a los dolientes; con ocasión de venturas y desventuras de acciones y personas extrañas el alma experimenta, por medio de las palabras, una experiencia propia.


... ¡ Cuántos persuadieron - y aún siguen persuadiendo - a tantos y sobre tantas cuestiones, con sólo modelar un discurso falso ! Si todos tuvieran recuerdo de todos los acontecimientos pasados, conocimiento de los presentes y previsión de los futuros, la palabra, aun siendo igual, no podría engañar de igual modo. Lo cierto es, por el contrario, que no resulta fácil recordar el pasado, ni analizar el presente, ni adivinar el futuro. De forma que , en la mayoría de las cuestiones, los más tienen a la opinión como consejera del alma. Pero la opinion, que es insegura y está falta de fundamento, envuelve a quienes de ella se sirven en una red de fracasos inseguros y faltos de fundamento.


... pues la misma relación guarda el poder de la palabra con respecto a la disposición del alma que la prescripcón de fármacos respecto a la naturaleza del cuerpo.


Gorgias de Leontinos, Encomio de Helena.


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